Resumen del año más raro de nuestras vidas, el 2020

El calendario llega a su fin, y aunque cambiar el número con el que nombramos esta nueva vuelta al sol no va a terminar con la pandemia del Coronavirus, para muchos es una especie de amuleto místico que les da esperanzas sin ninguna base más allá de la esperanza ingenua. Por mi parte es un buen momento, como cualquier otro, para hacer balance de lo que me han deparado estos 366 días.

Visitando las Pirámides de Giza en Egipto
Visitando las Pirámides de Giza en Egipto

En líneas generales ha sido un muy buen año, exceptuando el detalle de estar más de dos meses sin poder salir de casa por el confinamiento. Esto no ha supuesto ningún cambio en mi forma de vida más allá de no poder viajar. Llevo 10 años trabajando en remoto (no me llames nómada digital, aunque podría serlo), por lo que estoy muy acostumbrado al mundo online, y por fin los clientes se han dado cuenta de que las reuniones presenciales son una pérdida de tiempo. Algo bueno tenía que traer la desgracia del año.

Por suerte, ningún familiar ni amigo se ha visto afectado de gravedad por el Covid (sí se han contagiado unos cuantos, pero lo han superado), así que tan solo nos quedó seguir las indicaciones y no moverse de casa.

¿Y cómo soporta un blogger de viajes estar encerrado en casa? Con bastante facilidad en mi caso. Fue un buen momento para curiosear otros temas, como los sistemas complejos; terminar mi primer libro, publicado en septiembre (puedes verlo en unmanualdevida.com); hacer unos cuantos viajes a sitios cercanos; y venirme una larga temporada a mi tierra de nacimiento, Gran Canaria.

Templo de Ramsés II
Templo de Ramsés II

Por extraño que resulte, en 2020 he logrado viajar 69 días, dos más que en 2019, así que no se me ha dado tan mal. Empecé el año con la tradicional visita a Madrid por la feria de turismo Fitur, para justo después participar en un viaje de prensa a Cataluña, para conocer el paisaje de genios como Gaudí, Miró y Casals.

El único viaje al extranjero fue, en los prolegómenos de la pandemia, a la fascinante Egipto, un país que me encantó por su tremenda historia y maravillas antiguas, y me decepcionó un poco por ver en qué se ha convertido ahora: un caos sin vestigios de la gloria pasada.

Como este ha sido el año de viajar por España, aproveché mi larga estancia en Gran Canaria para visitar varias de las islas Canarias, como la mágica Fuerteventura (esas montañas desnudas tienen algo), la hermosa Lanzarote (ejemplo de cómo mantener una estética en todo un territorio), y la frondosa La Palma, donde incluso hay ríos y un verde tropical que siempre apetece ver.

Caldera de Taburiente en La Palma
Caldera de Taburiente en La Palma

Los viajes, mejor dicho, escapadas, que han completado este 2020 fueron por Andalucía, comenzando por la sierra de Almería, una tierra que me encandiló por todos los atractivos que tiene y lo desconocida que es, ideal para visitar en esta época que buscamos lugares con poca gente. Hacía tiempo que un lugar que, a priori, tiene tan poco que ofrecer, me gustara tanto, y es que la sierra de Almería te permite viajar desde el interior de la tierra hasta las estrellas.

La otra visita a Andalucía del año fue a Sanlúcar de Barrameda y ciudades cercanas, como Jerez de la Frontera y Cádiz, una zona que siempre es un placer visitar por el ritmo de vida que tienen. Completó el año de viajar por la península una escapada al Parque Natural de Somiedo y Belmonte, en Asturias, donde pude mirar, por primera vez, directamente a los ojos de un lobo ibérico.

A pesar de todo lo raro que ha traído este año y del festival de restricciones, vivir en un país tan diverso como España te permite cambiar de ambiente en muy pocos kilómetros, algo que ha sido toda una ventaja en 2020.

Ojos de Lobo Ibérico
Ojos de Lobo Ibérico

Los números del 2020

Tras el repaso a los viajes, llega el momento de mirar los fríos números, la única forma objetiva de saber qué ha pasado realmente. En cuanto al blog, era obvio que iba a haber una bajada de visitas por las restricciones de movilidad, que se ha saldado con un 17% menos de visitas, pero, curiosamente, con un 11% más de ingresos. Parece que estar llegando a los 16 años en la blogosfera te da cierta estabilidad ante la incertidumbre.

Efecto de una pandemia. Estadísticas de 2020 vs 2019
Efecto de una pandemia, estadísticas de 2020 vs 2019

Sobre las 8784 horas que hemos vivido de este peculiar 2020, sigo en mi línea de trabajar lo mínimo posible (364 horas según Toggl) ganando más que nunca (sobre 32000€), leer bastante (52 libros, más de 250 horas al año), y un consumo de ordenador y móvil similar al año anterior, de 1728 horas, a pesar de ser la única manera para muchos de interactuar con los demás mientras estábamos confinados.

Como resumen, afirmaría sin duda que este ha sido un buen año para mí, algo que no quiero que suene a fanfarronería y menos con tanta gente como ha sufrido, pero desde que he escrito el libro Un manual de vida (para el siglo XXI), sí que he notado un antes y un después en mi forma de ver las cosas. A eso se deben referir algunos sabios con que es importante leer y escribir.

Ahora me preparo para tomar las uvas en la playa de Las Canteras, mientras te deseo lo mejor en esta nueva vuelta al sol, y espero que también encares el nuevo año con muchas ganas, sobre todo, de viajar de forma responsable.

Acantilados de Agaete
Acantilados de Agaete

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