Josefov, el barrio judío de Praga
En la zona vieja de Praga, en el interior de la curvatura del río Moldava, está el barrio judío de Praga, creado alrededor del siglo XIII. Por ironías de la historia, ha llegado hasta nuestros días perfectamente conservado, ya que durante la segunda guerra mundial, los nazis, en vez de destruir todos los edificios, como en el resto de ciudades europeas invadidas, Hitler ordenó que se conservara para hacer un museo a una raza extinta. Menos mal que los extinguidos ahora son ellos.
En este barrio podemos visitar seis sinagogas, el viejo cementerio judío, la casa de nacimiento de Frank Kafka, y otros lugares de importancia histórica para los judíos.
Entre las sinagogas, la que más me gustó fue la sinagoga Española, y no porque tirara la tierra, si no porque el interior fue de los que más me sorprendió, con un estilo morisco que recuerda a la Alhambra de Granada. Justo al lado de la sinagoga está la estatua de Frank Kafka, la persona más famosa de este barrio.
La pequeña Sala Ceremonial de la Sociedad Funeraria de Praga también tiene su encanto, con un museo en el interior sobre el proceso funerario judío. Además, en esta calle hay varios puestos que venden recuerdos, y unas cuantas joyerías que parecen de calidad, vistos los precios que manejan.
La sinagoga Pinkas, a la puerta del viejo cementerio judío, tiene escrito en sus paredes el nombre de todos los judíos checos asesinados por los nazis. Un lugar bastante emotivo.
Podemos visitar estos edificios y el viejo cementerio judío con el ticket del museo judío de Praga, por unas 300 czk (12€). Un precio que me parece abusivo, sobre todo teniendo en cuenta que no incluye la entrada a la sinagoga Vieja – Nueva (otros 200 czk, 8€), en todos los edificios hay varias urnas pidiendo donativos, no dejan hacer fotos en el interior de ningún edificio, y la entrada completa al Castillo de Praga, mucho más interesante y cuya visita es más larga, son 350 czk (14€).
No se puede visitar solo el viejo cementerio judío, que es con diferencia lo más interesante del recorrido incluido en el ticket. Recomiendo esta visita solo a quien esté muy interesado en la historia judía en Praga, o tenga muchas ganas de ver el cementerio. Para los que viajan con un presupuesto ajustado, es mejor visitar los edificios por fuera, y acercarse al nuevo cementerio a ver la tumba de Franz Kafka. Gratis y mucho más interesante.
Una vez recobrado del susto de este ticket, podemos disfrutar de un paseo por el barrio, con una arquitectura muy llamativa y con muchos motivos judíos en todas las fachadas y tiendas. Se nota que este barrio es de los más ricos de Praga, con tiendas de alta costura, joyerías, buenos coches, etc. Podría decirse que Josefov es la 5ª avenida de Praga, aunque en cada esquina hay un lugar reseñable históricamente, como ocurre con toda la ciudad.
Un reportaje fotográfico maravilloso que recoge lo más relevante del Barrio Judía de Praga. Enhorabuena
Feliciano Robles.
Gracias!
Te adjunto el enlace a una wiki que he editado dedicada a Praga después de una visita que hice con la familia a esa histórica ciudad- Saludos
http://conociendopraga.wikispaces.com/