El río Moldava a su paso por Praga

El Moldava, el río más grande de la República Checa, divide a la capital checa en dos partes.  Un bonito paseo que se puede hacer por Praga es recorrer la vera del río al atardecer, pudiendo ver el Castillo de Praga, el Puente de Carlos, y muchos otros lugares destacados.

Uno de estos lugares es el Teatro Nacional, un imponente edificio al lado del río, y en el que podremos ver algunas de las representaciones teatrales más importantes del mundo.

Si seguimos dirección sur al lado del río, llegaremos a la denominada zona nueva. El aspecto es el mismo que en la zona vieja, con el mismo estilo arquitectónico y colorido de fachadas, aunque las calles son más anchas y hay menos edificios históricos. Uno de los lugares más llamativos es la Casa Danzante, un extraño edificio de estilo descontructivista que llama mucho la atención. Es muy simpático ver como en medio de tantas construcciones clásicas y regias se encuentra esta casa danzante, con un aspecto hiperfuturista, pero que no desentona para nada con el entorno. Un buen ejemplo de como hacer un bonito edificio hoy en día.

Sin embargo, lo que más disfrutaremos de este paseo será el propio río, cruzado por numerosos puentes y con varias islas jardín donde desconectar del bullicio de la ciudad. Además, si nos apetece podemos montarnos en un barco restaurante y disfrutar de la cena o de un espectáculo musical sobre el Moldava.