Plaza de la Ciudad Vieja, corazón de Praga
La Plaza de la Ciudad Vieja de Praga (Staromestské námestí) debe ser la parte más famosa de la ciudad, y por supuesto una visita imprescindible. Esta plaza está considerada como una de las más bonitas de Europa, ya que si bien no es de las más grandes, los edificios que la rodean son muy peculiares. Además, siempre hay mucha vida en la plaza, ya sea por las multitudes de turistas que la visitan, como por los espectáculos que se celebran aquí.
En cualquier festividad importante la plaza se llena de puestos de comida y de regalos, con una decoración acorde a la fiesta. Tanto en Semana Santa como en Navidad, instalan un escenario para actuaciones y un puente en el centro de la plaza, ideal para sentarse en el a tomar algo. Los puestos son similares en ambas fechas, cambiando los productos que comercian. Eso sí, en navidad la nieve decorativa es real.
Los puestos están muy cuidados, con una buena decoración, vendedores vestidos con las ropas típicas, bastante variedad de productos, y unos precios que no te hacen sentirte estafado.
A parte de los mercados instalados en la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga, hay muchas cosas para ver a pocos pasos. Empezando por el reloj astronómico; la Catedral de Tyn, mucho más bonita por fuera que por dentro, con sus características torres; la Iglesia de San Nicolás, cuyo interior sorprende por lo espartano de su fachada; la estatua de Jan Hus, un reformador religioso quemado por sus creencias; y los edificios de diferentes colores que rodean a la plaza y le dan ese toque tan peculiar y único.
Los edificios de colores pasteles es algo que se puede ver en toda Praga, dándole ese aire a ciudad antigua, pero en esta plaza y alrededores los edificios son más bonitos, e incluso algunos tienen dibujos muy curiosos en sus fachadas.
El ambiente en la plaza es muy bueno e internacional. En una pequeña vuelta se puede escuchar bastante español e italiano, más que checo. Quizás sea porque hablamos muy alto, o porque somos mayoría en esta zona de la ciudad. También hay unos cuantos mendigos, como ocurre en cualquier zona importante de una ciudad grande, pero están a lo suyo y no causan problemas. Lo que si se agradece es que casi no hay vendedores ambulantes, ya que en cualquier otra capital no se puede tener un minuto tranquilo por la cantidad de vendedores que intentan venderte algo.
La primera vez que vi esta plaza fue tras haber estado callejeando por las estrechas calles de la ciudad vieja. Estaba anocheciendo y al reloj astronómico le quedaban pocos minutos para empezar su peculiar concierto. Lo primero que vi fueron las torres de la catedral de Tyn, y después la gran plaza a sus pies. No se si por ser el primer lugar que vi de Praga o por el ambiente de la plaza, pero este siempre será uno de mis lugares favoritos de la ciudad.
Información para visitar la plaza de la ciudad vieja de Praga
- Cómo llegar hasta la plaza vieja:
Metro: Staromestska, línea A o Mustek, línea B.
Tranvía: Krizovnicke namesti, líneas 17 y 18. - Plaza de la Ciudad Vieja de Praga (Staromestské námestí)
- Reloj astronómico
- Turismo de Praga
- Hoteles en Praga
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