Málaga, qué visitar en un fin de semana

Málaga, la capital de la Costa del Sol, es una ciudad eclipsada por el cercano turismo de sol y playa de Torremolinos y Benalmádena, y si bien en la ciudad de Málaga también podemos disfrutar de la playa, tenemos muchos otros atractivos además del potente sol estival.

Málaga es una ciudad que podemos conocer en un par de días si aprovechamos bien el tiempo. Estos son algunos de los lugares que más me gustaron y que considero imprescindible visitar en un viaje a esta ciudad de Andalucía.

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Casco antiguo de Málaga

El centro de las ciudades suele ser lo más interesante y bonito de recorrer, y en Málaga no es la excepción. Este entramado de calles peatonales, repleto de bares de tapas, con tiendas donde comprar cualquier objeto con la palabra Málaga o Costa del Sol estampado, es uno de esos cascos antiguos que más disfruté paseando, aún a pesar de la gran cantidad de reparte flyers que te ofrecen las mejores ofertas de su restaurante.

Imprescindible pasear sin rumbo por estas calles al atardecer, en busca de ese bar de tapas donde disfrutaremos con los boquerones y el fino entre vendedores de biznagas (flores únicas en Málaga) y de almendra tostada.

Calle Granada y Calle Alcazabilla

Las calles con más solera de Málaga. La calle Granada es estrecha, con balcones enrejados y con locales de esos que rezuman historia, como la Bodega el Pimpi. En esta calle también está el Museo Picasso Málaga (6,5€ expo permanente, 4,5€ expo temporal), bastante prescindible en mi opinión por tener una colección un tanto escasa del genial pintor que podemos ver en menos de una hora.

En la calle Alcazabilla podemos recorrer 3.000 años de historia de Málaga en apenas 250 metros. Desde la entrada a la Alcazaba y el teatro romano, hasta el museo Picasso Málaga con los restos de la muralla fenicia o el Palacio de la Aduana.

Calle Larios

La 5ª avenida de Málaga, en la Calle del Marqués de Larios están todas las tiendas de moda más importantes, así como alguna heladería. Considerada la 5ª más cara de España, esta es la calle para pasear con el último modelito y que todo el mundo vea lo bien o mal que te queda. A parte de estar muy limpia, en verano hay un gran toldo para proteger del sol y poder pasear sin tanto calor.

El nombre de la calle no tiene nada que ver con la famosa ginebra, por lo menos directamente, ya que se debe al II Marqués de Larios, un importante empresario malagueño que fundó la calle y reactivó el comercio en la ciudad, y la ginebra la fundó el III Marqués de Larios, que no era descendiente directo.

Plaza de la constitución y Plaza de la Merced

La plaza de la Constitución marca el final de la calle Larios, donde encontraremos una gran fuente con sirenas y otras estatuas. Pasar por esta plaza es inevitable, aunque pocos se fijan en las portadas de periódico en el suelo del día que se aprobó la constitución de 1978. Esta plaza supone el pasar de la zona de tiendas de la calle Larios a la zona de tapas del resto del casto histórico.

Otra plaza muy interesante es la plaza de la Merced, renovada hace poco y que tiene un ambiente más juvenil y bohemio que otras partes de la ciudad.

En esta plaza se encuentra la casa natal de Pablo Picasso, actual fundación Picasso (entrada gratuita), donde se exponen distintos trabajos del pintor. La plaza de la Merced es un buen lugar para disfrutar de una cerveza al final del día o de un helado bajo la sombra de los árboles. Cerca de esta plaza encontraremos varias calles antiguas y sin turistas, ideales para un alojamiento céntrico y económico.

Alcazaba musulmana

A los pies del monte Gibralfaro se encuentra la Alcazaba (2,2€ entrada normal, domingos gratis), la fortaleza musulmana de estilo nazarí construida en el siglo XI. Como toda las construcciones árabes de la época, destaca por su integración con el entorno, y por el ambiente de paz y tranquilidad que se vive entre sus murallas. La frondosa vegetación y los canales de agua que surcan el suelo hacen que hasta en el día más caluroso estemos bastante frescos dentro de la Alcazaba.

Un extraordinario ejemplo de lo buenos constructores que eran los árabes, y en mi opinión, lugar imprescindible que visitar en Málaga. Disfrutaremos tanto de las vistas desde sus murallas como de los detalles árabes del interior.

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Catedral de Málaga, la Manquita

Dedicada a la Encarnación, esta catedral de estilo renacentista con toques barrocos recibe el sobrenombre de la Manquita porque le falta por construir una torre, pareciendo que está manca. Construida entre 1528 y 1782, su interior impresiona bastante más que su fachada exterior, donde encontraremos una sorprendente sillería en el coro e incluso un lindo gatito.

La entrada cuesta 5€, un precio que me parece excesivo para solo ver las naves principales, sin posibilidad de subir a alguna torre o tener una visita más completa. Si vamos con poco tiempo, me parece mucho más interesante visitar la Alcazaba.

También existe la posibilidad de subir al techo de la Catedral, una visita que sí que recomiendo, ya que las vistas y los sitios por los que te metes son muy chulos, sobre todo si haces el recorrido justo al atardecer, para ver el sol ponerse desde lo alto de la Manquita.

Playa de la Malagueta y el Muelle Uno

La Malagueta es la playa de Málaga. Situada a unos 10 minutos andando del centro de la ciudad, es la playa más cercana a la ciudad, además de al puerto. Su arena no es nada del otro mundo, así como su entorno, rodeado de edificios, pero ofrece un extenso arenal donde disfrutar del sol, y de un agua bastante más fría de lo que uno se espera del mar Mediterráneo. Es tan grande que es difícil llenarla, además de ofrecer muchos servicios próximos como chiringuitos o restaurantes.

El muelle uno es la nueva zona comercial al lado del puerto, entre la playa de la Malagueta y el centro de Málaga. Repleto de tiendas, este centro comercial al aire libre ofrece en verano un camino a la sombra y refrescado con agua para ir hasta la playa. Lo mejor, las vistas a Málaga dese el mar.

En el muelle uno se encuentra el nuevo Museo Pompidou, enfocado al arte contemporáneo. Es bastante pequeño, por lo que se puede ver perfectamente en una hora, y tiene piezas que, cuanto menos, sorprenden al visitate. Compra tu entrada al Centre Pompidou online aquí.

Parque de la Alameda o parque de Málaga

Este jardín botánico subtropical, cuyos terrenos han sido recuperados al mar, es uno de los paseos más agradables de hacer en pleno centro de Málaga. El pequeño bosque ofrece sombra en verano y paz ante las calles abarrotadas de coches. Dentro del parque – avenida hay varias estatuas de ninfas, un pequeño teatro al aire libre, uno o varios fiesteros e incluso un burro a la sombra. Muy concurrida por los malagueños, es uno de los mayores espacios verdes en el centro de la ciudad.

Mirador de Gibralfaro y terraza del AC Málaga Palacio

La carretera hasta el parador de turismo de Málaga, al lado del castillo de Gibralfaro, nos conduce hasta algunos de los mejores miradores sobre Málaga. Desde aquí podemos ver toda la ciudad, teniendo la Alcazaba y el casco antiguo en primer término, así como la Plaza de Toros y el puerto. Imprescindible ir al atardecer para tener las mejores vistas de Málaga.

Otro gran mirador, esta vez el centro, es la terraza en el piso 15 del AC Málaga Palacio. Este excelente hotel tiene en su último piso un bar restaurante con una de las terrazas más bonitas que podemos ver en la ciudad. La Catedral la tendremos a un palmo de nosotros, así como el casco antiguo. Una visita imprescindible.

Museo del automóvil de Málaga (para frikis de los coches y la moda)

Málaga es la segunda ciudad de España con más museos, solo detrás de Madrid. Aquí podemos encontrarnos con algunas de las mejores pinacotecas como el Museo Picasso, el Museo Thyssen, el Pompidou (única representación en España), así como muchos otros museos dedicados a la pintura y al arte en general.

Y más allá de los museos tradicionales, hay algunos realmente sorprendentes, como es el caso del Museo del automóvil y la moda de Málaga. Ubicado en el edificio de la antigua tabacalera, en este museo nos encontraremos con marcas tan conocidas como Rolls Royce, Coco Chanel, Aston Martin, Versace, Jaguar, Dior o Ferrari, que se entremezclan con una armonía absoluta para ofrecernos una visión única de cómo evolucionó el mundo del automóvil y de la moda.

Aunque no te gusten demasiado los coches, este es un museo sorprendente por su manera de tratar la evolución tanto de la moda como de los coches.

Como se puede ver, Málaga ofrece muchos lugares para visitar, y si bien el único monumento que me parece imprescindible de visitar es la Alcazaba, lo mejor es Málaga es su ambiente, tanto por la tarde como de noche, y por supuesto, aunque suene a tópico, sus gentes. Así, más que una ciudad para visitar monumentos, Málaga es para ir a disfrutarla.