El paraíso de la República Dominicana: Samaná
¡Se me congelaba la sangre! Nos decía McKenzie al hablar de su experiencia de visitar Canadá tras pasar toda su vida en la República Dominica, como cuenta mejor Ignacio Izquierdo, al que acompañé en este viaje. A parte de McKenzie; Carlos, Vanesa, Zulima, Julio, Inocencio, Andrés, Girandi, y muchos más son la República Dominicana. Las playas paradisíacas que nunca se terminan, con la omnipresente palmera inclinada sobre el océano, o el excelente clima tropical, son tan sólo añadidos que hacen más agradable el paisaje dominicano. Pero lo que de verdad te engancha del país es su gente.
Y más si vas a la región de Samaná, al noreste de la isla, un lugar privilegiado por su escasa explotación turística, alejada de las masas de Punta Cana o Playa Bávaro, con una naturaleza intacta y unas gentes de lo más auténticas.
Por eso, aunque vayas con pulserita a un resort de 5 estrellas, como fue mi caso (sí, ya lo sé, un viajero como yo con pulserita, pero realmente hay que probarlo para opinar, y mejor si es en estos hoteles), en Samaná puedes pasar unas vacaciones o una vida tranquila, gozando del océano Atlántico, el sol, la fina arena, los «ronsitos», los paseos en moto y la salsa, el merengue y cualquier otra variedad culinaria convertida en música.
La República Dominicana es ritmo, color y muchas risas. Aquí con un radiocasete a todo volumen la gente se echa a la calle, y tras terminar la jornada diaria, se ponen a bailar y disfrutar de la vida. Las prisas no existen. Total, ¿para qué estresarse? Estás en el Paraíso. Y se nota. Que te despiertes a las 6 de la mañana con un sol resplandeciente sobre el mar y un camarero que te saluda ya riéndose, es la mejor forma de empezar el día. Comprobado.
Vale, muy bonito esto del resort 5*, pero tengo un amigo que fue a República Dominicana y al intentar salir del hotel, el guarda, recortada en mano, le advertía de que era peligroso salir del complejo. Es cierto, hay zonas que igual no son tan seguras para el turista, que aunque hable español, no se puede quitar el sambenito de llevar un dólar grabado en la frente. Pero eso no ocurre en Samaná. Aquí hay muy pocos complejos hoteleros en una extensión como Murcia, por lo que «robar» al turista no es buena idea. Es mucho mejor tener tu propio negocio, y si un turista viene a comprar, ya intentarás venderle lo máximo posible, tras el regateo de rigor (siempre vas a pagar más de lo que cuesta, así que no te obsesiones con bajar el precio. Con pagar la mitad del primer precio ya puedes irte contento).
Entre las cosas que podemos hacer en la región de Samaná, ahí van unas cuantas ideas. Vayas por tu cuenta o en viaje Todo Incluido, son excursiones de las que seguro te van a hablar.
Si te gusta la naturaleza, no te pierdas el salto del Limón, una cascada donde te puedes bañar aunque llueva torrencialmente. Estás en el Caribe, ¿recuerdas? aquí siempre hace calor. Para llegar hasta la cascada del Limón hay que hacer un sendero de barro por medio de la selva, que está bastante bien indicado. Puedes ir por tu cuenta, o contratar un recorrido a caballo.
Ya que estamos en un país caribeño, no te puedes perder las playas paradisíacas como Playa Rincón, la de las Terrenas, las Galeras, y otras como la de la isla Barceló o Cayo Levantado. Al final no dejan de ser más que un montón de arena blanca rodeada de palmeras, pero nunca me canso de visitarlas y andar por ellas. ¡Incluso de tomar un ronsito en el agua!
En cuanto a las poblaciones, aquí no esperes grandes edificios monumentales ni palacios ni museos. Las dos principales ciudades, Las Terrenas y Santa Bárbara de Samaná, no pasan de 15.000 habitantes, y ambas son lugares donde vive la gente normalmente, no pueblos turísticos (quitando 5 casas en Samaná, que parecen más de chiste que otra cosa). Si son lugares donde la gente vive normalmente, significa que son ciudades muy vivas, así que no te pierdas un laaargo paseo por sus calles, ni visitar los mercados, a los señores jugando al dominó, o ver las sensuales decoraciones de las moto-taxi (Los motoconcho).
De noche ocurre una curiosa transformación, y que de verdad me hizo plantearme que Samaná es un mundo a parte. Los Car Wash, lavaderos de coches, se transforman en discotecas. ¡Una idea genial! Además, ocurre todos los días, imagínate lo contenta que está la gente con tanto baile y tanto ronsito.
Pero bueno, me voy a dejar un poquito de fiestas y volver a los lugares que puedes visitar en Samaná. Está el salto del Limón, Las Terrenas, Santa Bárbara de Samaná, las Galeras, la isla Bacardí, y que no se me olviden las tirolinas de Samaná, que terminan en una cascada en medio de la selva. Aventura, grandes paisajes y un final de película para otra visita totalmente caribeña.
Si te gusta el mar, entonces no puedes perderte el avistamiento de ballenas (marzo-mayo), o una excursión al Parque Nacional de los Haitises. Es muy extenso, por lo que en una excursión organizada te quedarás en las partes más interesantes de la costa. Aun así, como toma de contacto está muy bien.
Y con todo esto, tienes ideas más que de sobra para vivir una semana totalmente paradisíaca en Samaná. Para alojarse están los excelentes hoteles de la cadena española Bahía Príncipe, e incluso al Bahía Príncipe Las Terrenas van los dominicanos de Santo Domingo a descansar de fin de semana, lo que en mi opinión le añade más interés al haber más que turistas extranjeros.
Samaná igual no es tan barata como otras zonas de República Dominicana, pero te aseguro que merece el pequeño esfuerzo el estar en una zona con muy pocos turistas, y donde ser español es todo un plus que te abrirá las puertas a conocer gente maravillosa. ¡Venga otro ronsito!
Descubre la República Dominicana y Samaná:
- Turismo Samaná
- Turismo República Dominicana
- Hotel Bahía Príncipe Cayacoa 5*. Hotel de lujo cerca de la población de Santa Bárbara de Samaná.
- Hotel Bahía Príncipe El Portillo 5*. Turismo familiar, habitaciones tipo suite muy grandes, a 3 km de las Terrenas. Hay alquiler de motos y coches en el propio hotel para conocer la zona.
- Hotel Bahía Príncipe Cayo Levantado 5* GL. Auténtico lujo en su propia isla. Desconexión máxima, ideal para parar el mundo y bajarse un ratito a descansar en el Caribe.
- Este viaje fue gracias a la red social de viajeros minube, y fuimos Ainara García, Ignacio Izquierdo y Miguel Loitxate. Visita sus blogs para conocer más de Samaná, en la República Dominicana.
No haces ningún comentario sobre la gran epidemia de chikungunya. ¿Cómo está ese tema en la actualidad? Yo el pasado año anulé mis vacaciones allí y para este año no sé qué hacer.
Pues ni idea, yo fui en 2013 y no me tuve que vacunar de nada en especial ni me picaron mosquitos raros. Mira a ver en la página de la OMS a ver que dicen. Un saludo!
Que buen reportaje,
sin duda, Samaná es un lugar espectacular. Apartado de las zonas turísticas y con un encanto muy espacial.
Samanaá es una de nuestras regiones favoritas y mas recomendable que no se puede dejar de conocer al visitar República Dominicana.