II Blogtrip Cantabria Infinita, resumen e impresiones
Pasada una semana del inicio del II Blogtrip Cantabria Infinita, que mejor que contar como fue este viaje para blogueros organizado por el Gobierno de Cantabria.
El encuentro comenzaba el jueves de tarde en el Balneario de Solares, al que llegué en mi coche, ya que era el medio de transporte más rápido y así el sábado podía ir a los tramos del rally Cantabria Infinita. Disfrutando de los chorros del balneario, conocí a los primeros blogueros, los gallegos Juan Luis Rodríguez, de Blogs Turismo y Alberto Quintás, con su blog Los mejores top 10 y a los catalanes MªMercè Salomó, de Mil Camins y Marc Serena, de La vuelta de los 25.
El resto del grupo, que venía de Madrid, llegó justo antes de la cena, debido a un retraso en el vuelo. En este grupo estaban Jorge González, de En el mundo perdido, Helena Botella, de Mi maleta y yo, Francisco Javier Soler, de My guia de viajes, Joszzb, de El viajero impresionista, Manuel Guillén, de El mundo con mochila, Enrique Sancho, director de Open Comunicación, y las especialistas en gastronomía, MªÁngeles Barja, de Sabor Gourmet y Helen López, de Círculos de fuego.
En total 13 blogueros, cada uno de una punta de España (Asturias, Galicia, Zaragoza, Cataluña, Madrid, Andalucía, Canarias y Alicante), aunque curiosamente cinco tenemos nuestras raíces en Galicia.
Con la primera cena, en el restaurante del Balneario de Solares, empezó realmente el blogtrip, y con ello las sesiones fotográficas a cada plato que nos traían los camareros, todo ello entre conversaciones de viajes a cualquier lugar del mundo.
El viernes comenzó con el Encuentro de blogueros en el Museo Marítimo del Cantábrico, donde nos reunimos con Francisco Javier López Marcano, Consejero de Turismo, Cultura y Deportes de Cantabria, así como con otros blogueros cántabros. En el encuentro el consejero nos estuvo contando las relaciones que hay entre Cantabria y nuestra provincia, dejando bien claro el conocimiento que tiene sobre su tierra. Sobre Asturias, comentó que «asturianos y cántabros somos de la misma tribu», tal y como dice el presidente de Cantabria, Revilla, ya que hay muchas similitudes entre ambas provincias, aunque es cierto que en Cantabria están más cuidados los pueblos pequeños y tienen su propio mar.
Terminado el encuentro, hicimos una rápida visita al Museo del Marítimo, que cuenta con un gran acuario con especies locales. Como el día era tan soleado, salimos a la calle lo más rápido que pudimos, para disfrutar de la visita al Palacio de la Magdalena, y de la playa de El Sardinero.
A la hora de comer, nos llevaron al Restaurante Tonino, frecuentado por muchos famosos, donde hicimos una pequeña cata de vino cántabro. La comida fue excelente, hasta el punto de que a mi que no me gustan las navajas, me gustaron las que sirvieron, y descubrí un gran postre de la tierra, el flan pasiego, solo apto para los más golosos.
La comida se alargó más de la cuenta, como sería costumbre en todo el viaje, llegando al Parque de la Naturaleza de Cabárceno con el tiempo justo para ver a los gorilas, osos pardos, elefantes y poco más. La visita fue preciosa, como siempre en Cabárceno, el lugar más visitado de Cantabria. Tan solo comentar que es realmente grande, y por ejemplo en el recinto de los elefantes entra todo el Zoo de Madrid.
Vuelta a Santander, donde nos alojamos en el Hotel Bahía, situado al lado del centro y con unas maravillosas vistas desde la habitación a la bahía. Si entra en el presupuesto, creo que este hotel es uno de los mejores sitios donde dormir en Santander, ya que despertar viendo el amanecer sobre la bahía desde la propia habitación no tiene precio.
La cena fue en el moderno restaurante Sixtina, que a parte de su artística decoración que recuerda a la cueva de Altamira, tiene unos platos a la altura de los más grandes. No es para menos, ya que el hijo de los dueños está trabajando en el Noma de Copenhague, considerado el mejor restaurante del mundo.
Esta noche hubo que ir a dormir pronto, para ir al Rally Cantabria Infinita que se celebraba al día siguiente.
Amanecía con lluvia, como siempre ocurre en los rallyes del norte, así que a enfundarse en la cazadora e ir hasta el segundo tramo de la mañana. El blogtrip continuaba su marcha, yendo a la cueva El Soplao, sitio que tenía muchas ganas de visitar, por lo que tuve que saltarme un tramo para hacer esta visita, que fue una de las que más disfruté.
Al salir de la cueva, fuimos a la villa marinera de San Vicente de la Barquera, famosa por sus pescados y cantantes, que pudimos degustar en el restaurante Boga Boga (los pescados, no los cantantes). Otro menú para recordar por la calidad de sus platos, y es que los restaurantes del Club de Calidad de Cantabria Infinita son un acierto seguro. Terminado el postre, vuelta a la carretera para ver los tramos de la tarde, donde ya lucía el sol y era mucho más agradable ver la carrera.
Con el triunfo de Pons, y el segundo puesto de Vallejo, vuelta a Santander para disfrutar de la cena en la Bodega del Riojano en Santander. Este lugar bien merece una visita, aunque sea tan solo para tomar una copa de vino, ya que su decoración, a base de toneles pintados por artistas, es digna de verse en directo.
Esta era la última noche del blogtrip, así que unos cuantos valientes terminamos cantando algunos éxitos españoles en el karaoke, donde los compañeros de viaje me felicitaron mi próximo cumpleaños.
El domingo empezaba luminoso, con un espectacular amanecer sobre la bahía, y con muchas fuerzas para seguir recorriendo esta tierra que poco a poco nos iba encandilando a cada uno de nosotros.
Acompañados por TVE (vídeo a partir del minuto 7), llegamos a la primera visita, la neocueva de Altamira, una reproducción de la capilla sixtina del arte prehistórico, ya que la original está cerrada al público para conservar las pinturas.
Después fuimos a Santillana del Mar, considerado uno de los pueblos más bonitos de España, y la que oímos que era la villa de las tres mentiras (no es santa, ni llana ni tiene mar), aunque la guía nos desmintió las tres mentiras. Paseando bajo el sol por las empedradas calles tuvimos que tomar la decisión de visitar el claustro o ir a conocer otro pintoresco pueblo cántabro. Ganó la opción del pueblo, así que pusimos rumbo al valle de Cabuérniga para llegar a Bárcena Mayor, un pueblecito montañés en un entorno privilegiado que está muy cuidado, pareciendo casi un museo.
A la hora de la comida, donde tan solo unos pocos teníamos hambre tras tantos banquetes, fuimos al restaurante Casa Nacho en Ruendes, donde conocimos al dueño, enamorado de Andalucía, y degustamos un pote cántabro y un solomillo exquisito. Para mí, uno de los mejores restaurantes que visitamos, aunque otra vez íbamos justos de tiempo y tuvimos que marchar rápidamente al aeropuerto, para que no perdieran el avión quienes tenían que volver a Madrid y Barcelona.
La despedida en el aeropuerto fue un poco dura, porque señalaba el fin de un viaje fantástico acompañado por unos inmejorables compañeros de ruta. Menos mal que nos podemos leer por Internet, y seguramente coincidamos en futuros viajes.
Aunque para mí no terminaba el viaje por tierras cántabras, dando un último paseo por el faro de Santander, admirando lo infinita que es esta pequeña provincia, y planeando ya nuestro próximo encuentro.
Desde aquí me gustaría dar las gracias al Gobierno Cántabro y a Open Comunicación por organizar este blogtrip y confiar en todos nosotros, así como a nuestra guía, Henar Díez, una cántabra enamorada de su tierra que nos lo explicó todo sobre esta extraordinaria región.
¡Hey! Que buen resumen del blogtrip. Se nota la calidad de las fotos.
Además no te quejarás de la felicitación adelantada de cumple…
Un saludo ;)
Vaya señoras fotazos!! Son increibles!! Y el resumen fenómeno
La felicitación me hizo mucha ilusión, totalmente inesperada :D
Enhorabuena Machbel porque has hecho un resumen perfecto de nuestro gran encuentro en Cantabria. Fíjate que hace muy poco y cada día le doy más valor. Y que te voy a decir de las fotos, si eres un maestro. Me vas a tener que dar unas clases….
Por cierto, acabo de colgar en mi blog tu foto de mi foto en los jardines de piquio, me encanta!!! Muchas gracias sr. Karaoke!!
tendria que ver el edificio en el proipo lugar porque la arquitectura en mi opinon debe adecuarse al lugar en ei que va a estar,de todos modos no me emociona.Parece el edificio de un pais de la era comunista.Frio,distante,alejado de la vida cotidiana del ser humano,sin embargo debe ser muy util y los espacios bien definidos respecto a su funcion.