Experiencia Muchosol en Valencia
1.000.000 de pisos vacíos en la Comunidad Valenciana. Ese número retumbaba en mi cabeza mientras asistía a la presentación de la nueva Muchosol. Toda la población de Asturias podía mudarse a Valencia, y sin tener que compartir piso. Otra cosa es que, los asturianos o cualquier persona, encontrase un piso de confianza para disfrutar de sus vacaciones.
Porque sí, sería una campaña de marketing alucinante mover a toda la población de Asturias a la comunidad Valenciana, aunque fuera sólo durante un par de meses para disfrutar del sol, de la comida en la playa y de la albufera de Valencia, por decir uno de esos sitios imprescindibles a visitar.
Pero lo serio de la cuestión es que cuando buscas un apartamento para disfrutar de tus merecidas vacaciones, las cosas se complican bastante. A algunos, como a mi, nos gusta alojarnos en un apartamento cuando vamos de viaje.
Son mucho más grandes que una habitación de hotel, te permite estar cerca del centro de la ciudad sin pagar un precio desorbitado, y quieras que no, a mi me gusta descubrir esos pequeños detalles que hacen que un piso en Seúl sea totalmente a uno en España o en Budapest. Que si el tipo de ducha, que si los grifos con pedal, o simplemente las vistas desde la habitación.
Por lo menos, puede que veas a la vecina del cuarto tendiendo la ropa, algo que en un hotel dificilmente va a pasarte.
¿A que viene toda esta diatriba? A una simple cuestión: cada vez es más difícil encontrar un apartamento turístico que me guste y que respete todas las leyes.
En AirBnB podemos encontrar multitud de apartamentos, muchos sensacionales, pero es difícil saber si cumplen con la legalidad, pues la plataforma no obliga a ello, y cada vez es mayor el daño que produce a los locales (esos a los que intentas imitar en tu viaje) este tipo de descontrol, pues los alquileres para larga estancia están por las nubes, despoblando de esos mismos locales el centro de ciudades como Venecia, Barcelona o Madrid, por citar algunas cercanas.
En este viaje a Valencia descubrí a Muchosol, empresa española que soluciona este problema ofreciendo apartamentos turísticos totalmente legales y con todas las garantías a viajeros como tu y como yo. ¿Cómo lo hacen? Contactando únicamente con proveedores de confianza, con empresas que se dedican a esto, no con el propietario final. De esta forma se pagan los justos impuestos por un justo servicio y todos contentos.
Tras haber probado ambas formas de viajar (en Valencia me alojé en un apartamento de Muchosol), puedo decir que se nota la diferencia. Vale que cruzar los dedos deseando que el apartamento sea mejor que en las fotos puede llegar a resultar emocionante, pero cuando te encuentras con cucarachas, con que la mampara de la ducha se cae, o con que ese maravilloso loft en realidad es un bajo sin ventanas, la broma ya no hace tanta gracia.
Y ahí es cuando aprecias que el baño sea totalmente nuevo y con una limpieza impecable, de hotel de 5 estrellas, o que el sofá cama sea realmente una cama donde se pueda dormir, o que el colchón siga en plena forma, o incluso, detalles como la botella de cava y los bombones para empezar las vacaciones de una forma muy dulce.
Los pisos de Muchosol no son los más baratos, ni lo pretenden. Eso sí, son buenos apartamentos, incluyen siempre la limpieza y los gastos de gestión, y ante cualquier problema, siempre tendrás un teléfono al que llamar y que te atiendan en español para solucionarte el problema.
Muestras de calidad que se notan y se valoran mucho, sobre todo cuando viajas con hijos o cuando quieres hacer una cosa: descansar sin preocupaciones.
Yo seguiré usando AirBnB, que me gustan las emociones fuertes, pero ya me apunté en mi lista personal de proveedores a Muchosol para consultarla también antes de escoger alojamiento.
Quien sabe, igual en mi próximo apartamento el jacuzzi funciona de verdad.
Estoy entusiasmado de encontrar webs donde ver informacion tan util como esta. Gracias por facilitar este articulo.
Saludos